Los científicos descubrieron por qué los gatos observan a sus dueños. Y es sorprendente.
Los gatos son criaturas bastante enigmáticas. Puedes alimentarlos, jugar con ellos y vivir con ellos una y otra vez, y aún así te mirarán como si supieran más que tú. ¡Y es verdad! Desde que los humanos domesticaron a los gatos, continúan rodeándose de estos peludos «místicos» que, a diferencia de los perros, no muestran sus emociones en bandeja de plata.
Pero aquí hay un dato interesante: ¡resulta que los gatos no son tan egoístas como muchos piensan! Investigaciones recientes de la Universidad de Kioto han demostrado que nuestros amigos peludos no solo andan por la casa por su cuenta, sino que también nos observan de cerca. Y no, no es porque quieran encontrar el momento perfecto para tirar otro jarrón. Realmente muestran un interés sincero por saber dónde estamos. ¿Sorprendidos? ¡Yo también lo estoy!
¿Por qué un gato necesita saber dónde estás?
¿Crees que simplemente te persigue para pedir comida de nuevo? No del todo. Resulta que los gatos forman en su mente algo así como un «mapa mental» de tus movimientos por la casa. Sí, literalmente están rastreando cada uno de tus pasos, construyendo rutas en su cabeza: vas a la cocina, luego al salón, y de repente apareces en un lugar inesperado. Y ahí está tu gato, sentado mirándote como si hubieras roto todas sus expectativas. ¡Ah, la independencia!
¿Y sabes qué es aún más interesante? Los estudios han demostrado que cuando un gato escucha tu voz desde un lugar inesperado (digamos, decidiste hablar por teléfono desde el baño), puede sorprenderse e incluso confundirse un poco. Es como si alguien hubiera alterado su «plan de navegación». Increíble, ¿verdad? No solo nos observan, sino que literalmente «controlan» nuestros movimientos, creando en su mente esquemas de rutas habituales.
¿Por qué hacen esto los gatos?
Científicos de la Universidad de Kioto llevaron a cabo un experimento divertido. Reprodujeron grabaciones de las voces de los dueños de los gatos desde diferentes rincones de la casa y observaron sus reacciones. Cuando la voz provenía de lugares familiares, todo estaba bien. Pero tan pronto como el sonido venía desde un lugar inesperado, la reacción era inmediata. Los gatos se confundían, se detenían y parecían como si su mundo se hubiera dado vuelta.
En realidad, esta costumbre de los gatos tiene profundas raíces. En la naturaleza salvaje, siempre necesitaban estar alerta para saber dónde estaban sus «manadas» y dónde estaba el peligro. Esta característica la han conservado en el hogar. Aunque, quizás, en los apartamentos modernos, simplemente están comprobando cuándo irás a la cocina para estar listos para saltar al suelo por un pedazo extra de comida.
La importancia de los rituales
Los gatos son criaturas de hábitos. No solo te observan por diversión, literalmente esperan previsibilidad de tu parte. Es posible que ni siquiera te des cuenta de cómo has desarrollado tus rituales: te levantas, preparas café, enciendes la computadora. Pero tu gato lo sabe perfectamente y espera que sigas tu plan habitual. Trata de romperlo, y lo notará de inmediato. Si te levantas antes de lo habitual o, ¡no digas más!, decides saltarte la taza de café matutina, espera una mirada desconcertada de tu gato. «Hey, ¿qué está pasando? ¿Te das cuenta de que aquí vivimos según un horario?»
Los gatos no son tan egoístas como parecen
Estas investigaciones destruyen el mito popular de que los gatos son indiferentes y egoístas. De hecho, observan cuidadosamente a sus dueños y quieren saber qué sucede a su alrededor. Aunque lo hagan con una apariencia de calma real, en sus corazones peludos definitivamente hay un lugar para nosotros. Así que la próxima vez que tu gato te mire en silencio, debes saber que no es solo una mirada. Es un verdadero cuidado para asegurarse de que estás seguro o para no perderse la cena.