Mascotas

Cómo entender lo que dice un perro: 7 secretos para comunicarse con los perros. Traducimos el lenguaje canino al humano.

Cada día los perros «hablan» con nosotros, sin usar palabras. Mueven sus colas, organizan ruidosos conciertos de ladridos, nos lamen, juegan y muestran una gran cantidad de emociones. Pero para entender lo que un perro quiere decir, es necesario saber «escuchar». Y escuchar significa notar todo lo que muestra el perro: cómo sostiene su cola, qué sonidos emite, qué hace con sus orejas y ojos.

Es como abrir un libro sin palabras. Aprender a «leer» a un perro no es tan difícil si se conocen algunas reglas. En este material te contaremos cómo reconocer las señales que envían los perros y lo que significan. Esto ayudará a entender mejor a nuestros amigos de cuatro patas y responderles con reciprocidad.

Invitación al juego

Los perros a menudo invitan a jugar adoptando una pose fácilmente reconocible. Bajan la cabeza y las patas delanteras al suelo, mientras que la parte trasera del cuerpo con la cola elevada y moviéndose de lado a lado permanece arriba. Es parecido a una reverencia o una venia baja. De esta manera, el perro parece decir: «¡Mira lo divertido que es, vamos a jugar!»

Este gesto muestra que el perro está de buen humor y no representa una amenaza. Quiere que lo incluyan en el juego. Puede ser una invitación tanto para otros perros como para personas. Si ves y entiendes qué señales te da tu perro, podrás prestarle la atención necesaria y pasar tiempo juntos jugando a sus juegos favoritos.

Gestos de sumisión

Los gestos de sumisión de un perro son su manera de mostrar que no quiere pelear y está dispuesto a ceder. Por ejemplo, cuando un perro baja la cabeza, aprieta las orejas, a veces mira hacia un lado evitando el contacto visual directo. Estos movimientos junto con el alejamiento de la mirada pueden decir: «Soy pacífico y no represento una amenaza».

Otro gesto expresivo con esta interpretación es cuando el perro se acuesta en el suelo, recoge sus patas debajo de él o las estira hacia adelante, e incluso puede rodar sobre su espalda mostrando el vientre. Este es un signo de que el perro confía completamente en la persona o el otro perro.

Manifestación de agresión

Cuando un perro siente una amenaza o quiere dominar, esto se refleja claramente en sus posturas y gestos. Uno de los signos más claros de agresión es la postura firme y tensa. A menudo el perro orienta su cuerpo directamente hacia el objeto que percibe como amenaza. Sus orejas pueden estar hacia adelante para mostrar disposición a actuar, y la cola puede estar levantada y en un leve movimiento o permanecer estática.

Los signos de agresión a menudo incluyen dientes descubiertos y un gruñido profundo o ladrido de advertencia. Los ojos del perro pueden estar fijamente orientados hacia su objetivo, manteniendo una mirada firme y desafiante. El perro también puede emitir sonidos de advertencia bajos e incluso avanzar como si se preparara para atacar.

Si ves tales signos de agresión en un perro, es importante mantener la calma y evitar enfrentamientos directos. No debes hacer movimientos bruscos, y lo mejor es retroceder lentamente, liberando espacio para el perro. Es crucial mostrar que no eres una amenaza y darle al perro la oportunidad de calmarse.

Movimiento de la cola

Si un perro mueve su cola rápidamente con una amplia amplitud, esto a menudo indica alegría y entusiasmo. Así puede saludarte cuando vuelves a casa o te preparas para sacarla a pasear. En algunos perros la cola se mueve tan vehementemente que su cuerpo también comienza a balancearse.

Sin embargo, si la cola se mueve con movimientos pequeños y rápidos, esto puede indicar nerviosismo o inseguridad del perro. Una cola elevada y que se mueve lentamente puede señalar un comportamiento dominante o atención alerta.

Cuando la cola está baja y no se mueve, esto puede ser un signo de miedo, sumisión o mal humor. También es importante prestar atención a la posición de la cola: si está fuertemente presionada contra el vientre, indica mayor miedo o sumisión.

Interpretando el movimiento de la cola en el contexto del comportamiento general, la expresión facial y las circunstancias, puedes entender más precisamente lo que el perro intenta decir.

Importancia de las patas y sus movimientos

La posición y el movimiento de las patas transmiten información importante sobre el estado de ánimo del perro. Cuando un perro está de pie con confianza, con sus patas firmemente situadas bajo el cuerpo, esto indica que se siente cómodo y tranquilo. Esta posición del cuerpo expresa estabilidad y paz.

Por el contrario, si las patas del perro tiemblan o las mueve de un lado a otro, puede ser un signo de nerviosismo o inseguridad. Tal vez el perro sienta estrés o incomodidad debido a la presencia de otros animales, personas o la situación en general.

Si un perro extiende una pata hacia adelante, como apuntando a alguien o algo, puede ser un signo de curiosidad o de querer llamar la atención. Cuando un perro levanta una pata durante un encuentro con una persona u otro perro, está mostrando buena disposición o espera caricias.

Si un perro se acuesta de lado con las patas extendidas hacia atrás, esto a menudo indica una relajación completa y confianza en el entorno. Es un signo de comodidad y de que el perro se siente seguro y no necesita estar alerta.

Observar las patas y sus movimientos ayuda a entender mejor el estado de ánimo del perro y su actitud hacia lo que está sucediendo en ese momento.

Posición de las orejas

Las orejas del perro no son solo una parte de su aparato auditivo, sino también una herramienta importante para «hablar» sin palabras. Por la posición y dirección de las orejas, se puede averiguar mucho sobre el estado de ánimo y emociones del perro.

Cuando las orejas del perro están levantadas y orientadas hacia adelante, esto significa que está alerta, interesado en algo o concentrado. El interés y la concentración en algo delante de él se expresa de esta manera.
Si las orejas están pegadas hacia atrás, el perro puede sentir miedo, estar bajo estrés o mostrar sumisión. Esta posición de las orejas combinada con una mirada evasiva y la cabeza ligeramente bajada suele ser una señal de que el perro no quiere conflicto.

Sacudir las orejas o moverlas rápidamente puede indicar irritación o intentar deshacerse de algo incómodo, como un insecto que ha entrado en la oreja.

Al prestar atención a las orejas del perro, se puede reconocer y prever mejor el comportamiento de tu mascota, lo que ayuda en la comunicación y entrenamiento.

Interpretar el lenguaje corporal de los perros no siempre es fácil, pero si se conocen las diferencias clave entre los gestos, se puede entender lo que sienten y quieren. Gracias a la comprensión de estos matices, se puede evitar la incomprensión o conflictos con tu mascota.

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